Mi querido hijo Florín:
¡Acabas de nacer! ¡Qué gran alegría nos has dado a todos!
Cuando te tuve por primera vez en mis brazos te dije al oído estas palabras que quiero inmortalizar por escrito para que nunca las olvides: “¡Hijo mío! ¡Tenemos un gran plan para ti! ¡Jamás tendrás que buscar empleo porque trabajarás en el negocio familiar! ¡Qué gran oportunidad para ti y qué felices seremos trabajando juntos en nuestro negocio! Te queremos y no olvides que el lema de nuestra familia es: uno para todos y todos para el negocio”.
Quien así se expresaba era Florín padre, el fundador de Supermercados Florín. Su orgullosa esposa doña Susana, a quien vemos en el parque, participaba del espíritu de su marido. Todos los días iba a trabajar duramente al negocio y era